“La conciencia es la mayor alquimia que hay. Solo sigue haciéndote más y más consciente, y encontrarás que tu vida cambia para mejor en todas las dimensiones posibles. Te traerá una gran satisfacción”.
Osho
Cuando vivimos en “piloto automático” no somos conscientes de nuestra vida, no la disfrutamos plenamente y no tenemos la capacidad de mejorarla. Por eso es importante tomar consciencia, vivir cada momento en presente y liberarnos de los automatismos que nos condicionan.
Para salir del piloto automático es necesario bajar el ritmo frenético que solemos llevar tanto en nuestra vida como en nuestra mente. Muchas veces vamos de un lado a otro, con prisas y sin prestar atención a lo que estamos haciendo. Algunos síntomas del piloto automático pueden ser:
- Sentir ansiedad
- Olvidar frecuentemente donde has dejado algo (las llaves del coche, el teléfono móvil o el bolso…)
- Cometer errores por estar distraído
- Sentimiento de vacío interno
- Falta de claridad mental
Este tipo de vida nos hace infelices y llegamos a sentir gran insatisfacción personal.
A continuación te sugiero algunas rutinas y hábitos que puedes ir introduciendo en tu día para salir del piloto automático y vivir de forma satisfactoria y plena.
- Al despertar por la mañana, no distraigas tu atención con el smartphone, redes sociales, etc. Dedica unos momentos a estar en calma.
- Dedica los primeros momentos del día a tu autocuidado de forma consciente. Si te das una ducha, por ejemplo, siente el agua sobre tu piel y permítete disfrutar de ella sin tener la cabeza en otra cosa.
- También puedes convertir el desayuno en un ejercicio de atención plena:
- Realízalo en silencio.
- Degusta cada bocado.
- Disfruta de tus alimentos.
- Agradece este momento.
- Prepara tu día con todo lo que vayas a necesitar prestando atención a los detalles.
Otra sugerencia que puede tener un efecto muy positivo en tu toma de conciencia para salir del piloto automático es realizar paradas “minful” a lo largo del día. Realiza estas paradas de forma intencionada. Puedes ponerte una alarma en el móvil para recordar hacerlas.
Parada “mindful”:
- Deja por unos momentos lo que estás haciendo.
- Realiza unas respiraciones profundas.
- Siente tu cuerpo con cariño y date cuenta de si tienes alguna tensión o alguna necesidad. Quizá tengas sed y no te habías dado cuenta, o algo de frío, o necesites ponerte de pie porque tienes las piernas adormecidas.
- Proporciona a tu cuerpo lo que necesite, no lo ignores.
- Puedes hacer lo mismo con el entorno, observa lo que escuchas a tu alrededor, trata de percibir cualquier sensación que te transmitan tus sentidos.
- Tras estos minutos de pausa, vuelve a tu actividad, pero continúa con una actitud de atención, de amabilidad y de consciencia. Trata de no perder el espíritu «mindful» que estás cultivando.
Por supuesto, la práctica diaria de meditación hará que dejes de vivir en piloto automático y vivas de manera más plena y satisfactoria. Si quieres practicar con audios guiados te invito a visitar mi canal de YouTube donde encontrarás diversas prácticas.
Un abrazo, Sara.
