¿En qué consiste este entrenamiento?
En meditación se realizan prácticas durante las cuales la atención se centra en un objeto, que puede ser interno o externo.
Un objeto interno sería la respiración o la atención a nuestro cuerpo. Uno externo podría ser centrarnos en los sonidos, la llama de una vela o un mandala. Para meditadores avanzados, también está la opción de centrar la atención en la propia consciencia o en el estado puro de contemplación, pero esto es un paso más allá, para personas que lleven largo tiempo meditando.
El primer paso para meditar es «estar plenamente en el momento que se está viviendo», observando nuestros pensamientos, pero sin aferrarnos a ellos.
¿Qué quiere decir no "aferrarnos" a los pensamientos?
Nuestros pensamientos muchas veces se agolpan, son caóticos, nos hacen ver una realidad distorsionada. Con frecuencia hacemos que un pequeño suceso se convierta en algo sumamente grave que nos atormenta. Si te aferras a esta forma de ver un suceso o problema, estarás dejándote llevar por tus pensamientos y permitiendo que esta forma de entenderlos, domine tu vida.
En cambio, si pasas de estar enganchado a tus ideas, a simplemente observarlas y reconocerlas, serás capaz de dominar tú mismo la situación y no dejarte arrastrar por ideas preconcebidas o recurrentes.
Un ejemplo de sencillo:
Estás pensando en algo que va a ocurrir en el futuro y que consideras que va a ser algo nocivo para ti. Piensas una y otra vez en ello y realmente empiezas a preocuparte y sentirte inquieto.
La forma de afrontarlo sería pensar algo así:
«Vale, estoy pensando que esto que va a pasar en el futuro me va a perjudicar. Pero aún no ha pasado y no puedo hacer nada ahora».
Así que dejas pasar este pensamiento y te centras en lo que sí está ocurriendo ahora, en este momento, que es el único en el que puedes vivir y actuar.
Cuando meditamos y calmamos el torrente de ideas y emociones, somos capaces de tener otros puntos de vista, o al menos, de tomarnos los acontecimientos de la vida de una manera más sosegada.
Autoconocimiento
Favoreciendo el estado de silencio y concentración, se trabaja el apaciguar poco a poco la agitación mental. Aprendemos además a que esto ocurra de forma amable con nosotros mismos y sin emitir juicios sobre si lo estamos haciendo bien no.
Simplemente practicamos la meditación, permanecemos en silencio, dejamos que la calma se vaya asentando en nuestro interior, cuando nos distraemos, volvemos a centrarnos y así hasta que vaya surgiendo un nuevo espacio en nuestra consciencia, que nos permita una visión más clara.
A través de la meditación, se conecta con un sentido de percepción profundo. Se trata de re-descubrir nuestro estado interno natural, que siempre ha estado ahí, pero que muchos tenemos olvidado, debido al ritmo de vida tan ajetreado de la sociedad actual. Todos somos capaces de meditar, de estar en calma, de vivir de forma sosegada. Pero el estilo de vida contemporáneo y los comportamientos aprendidos a lo largo de los años nos lo impiden.
Cuando descubrimos nuestro auténtico estado interior podemos vivir conscientes y más acordes con nuestros valores esenciales.
La meditación nos ayuda a llegar a conocernos realmente. Nos hace más sabios, pero no una sabiduría en el sentido académico del conocimiento. Meditar nos guía a un auto-conocimiento profundo que nos permitirá desidentificar creencias, desapegarnos de nuestro ego y vivir con mayor libertad. Podremos descubrir quiénes somos en nuestra verdadera naturaleza.
Es importante entender que meditar no es sólo es el hecho de sentarnos y estar en silencio, sino que es esencial cultivar el estado de conciencia (estar atento, presente y volviendo a la atención cada vez que te distraigas) con cada práctica y llevarlo a nuestro día a día.
Opinión personal
En mi experiencia personal, meditar es la forma que tengo de desechar la «basurilla» mental y deshacerme de patrones mentales que me perjudican y me hacen sufrir.
– Meditar es respirar y sentir paz. Estar a gusto conmigo misma. entrenar la capacidad de concentrarme y prestar atención consciente. Dejar pasar lo que venga a mi mente, aceptándolo pero sin aferrarme a ello.
– Meditar es permitir a mi mente descanso y dar paso a otro tipo de conocimiento innato, que habita en mi ser. Dar paso a un auto-conocimiento profundo que me permita obtener bienestar y poner el rumbo que yo quiera a mi vida.
